
Especialistas del centro dictaminaron que el virus difiere en su estructura genética de brotes anteriores caracterizados por su alta mortalidad.
El director interino del CDC, Richard Besser, alertó que es necesario mantener la guardia en alto pese a los reportes esperanzadores de las últimas horas.
Vemos que el nivel de severidad es similar al de la influenza común de temporada, causante de un promedio de 36 mil muertes cada año, agregó Besser en una entrevista radial.
Acotó que el gobierno trabaja en una vacuna, la cual esperan tener lista para el próximo otoño, cuando comienza la época más letal de la gripe.
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