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El jefe de servicio de la Unidad de Rehabilitación Psiquiátrica del hospital de Zamudio (Vizcaya), José Juan Uriarte, ha subrayado hoy que 'el uso actual de medicamentos en salud mental no siempre responde a criterios racionales' y ha criticado la extensión 'escasamente justificada' de su utilización.
Uriarte, a través de un comunicado, ha opinado que 'la enorme difusión y éxito' de los psicofárma
cos en la última década obedece a 'causas diversas', entre las que ha citado los avances técnicos y la 'excesiva confianza' en ellos, la 'eficacia relativa' de otros métodos de intervención como la psicoterapia y la influencia de la industria farmacéutica.
'Un concepto simplista de las enfermedades mentales y las conductas humanas ha contribuido a reducir el estigma asociado a los tratamientos con psicofármacos, especialmente los antidepresivos, que han pasado en poco años de ser rechazados o consumidos a escondidas a ser demandados de forma directa por los pacientes', ha destacado el experto en psiquiatría.
Ha puesto el ejemplo del 'Prozac', del que ha dicho que forma parte ya de 'la cultura del siglo XX y del XXI'.
'La industria farmacéutica ha estirado hasta lo indecible enfermedades mentales tradicionales como la depresión', ha estimado Uriarte, quien ha impartido hoy una conferencia en Bilbao bajo el título 'Uso y abuso de la prescripción de los psicofármacos. Hacia un uso racional'.
Este sector industrial, ha añadido, 'ha contribuido a una verdadera explosión y expansión' de los problemas de salud mental susceptibles de tratamiento, incluyendo situaciones lindantes con la normalidad 'como la timidez o la conducta hiperactiva en la infancia'.
Ha considerado que los tratamientos psicológicos y psicoterapéuticos 'adolecen de las mismas carencias que los psicofármacos o incluso mayores' pese a contar con 'una mayor simpatía inicial'.
Por ello, ha abogado por 'avanzar hacia un mayor conocimiento' que facilite un 'abordaje integral' que combine 'sabiamente' lo mejor de la vía psicofarmacológica y psicoterapéutica y redunde en 'una mayor eficacia y seguridad' de las intervenciones.
Uriarte, a través de un comunicado, ha opinado que 'la enorme difusión y éxito' de los psicofárma
cos en la última década obedece a 'causas diversas', entre las que ha citado los avances técnicos y la 'excesiva confianza' en ellos, la 'eficacia relativa' de otros métodos de intervención como la psicoterapia y la influencia de la industria farmacéutica.'Un concepto simplista de las enfermedades mentales y las conductas humanas ha contribuido a reducir el estigma asociado a los tratamientos con psicofármacos, especialmente los antidepresivos, que han pasado en poco años de ser rechazados o consumidos a escondidas a ser demandados de forma directa por los pacientes', ha destacado el experto en psiquiatría.
Ha puesto el ejemplo del 'Prozac', del que ha dicho que forma parte ya de 'la cultura del siglo XX y del XXI'.
'La industria farmacéutica ha estirado hasta lo indecible enfermedades mentales tradicionales como la depresión', ha estimado Uriarte, quien ha impartido hoy una conferencia en Bilbao bajo el título 'Uso y abuso de la prescripción de los psicofármacos. Hacia un uso racional'.
Este sector industrial, ha añadido, 'ha contribuido a una verdadera explosión y expansión' de los problemas de salud mental susceptibles de tratamiento, incluyendo situaciones lindantes con la normalidad 'como la timidez o la conducta hiperactiva en la infancia'.
Ha considerado que los tratamientos psicológicos y psicoterapéuticos 'adolecen de las mismas carencias que los psicofármacos o incluso mayores' pese a contar con 'una mayor simpatía inicial'.
Por ello, ha abogado por 'avanzar hacia un mayor conocimiento' que facilite un 'abordaje integral' que combine 'sabiamente' lo mejor de la vía psicofarmacológica y psicoterapéutica y redunde en 'una mayor eficacia y seguridad' de las intervenciones.
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